domingo, 29 de junio de 2014

Ilión

Mi querido amigo y nunca bien ponderado Fer (cómo se te echa de menos, titán; a ver si nos vemos por Gijón alguna vez...), hace tiempo que me pidió opinión sobre el libro de su admirado Dan Simmons: Ilión.

Reconozco que no se puede decir que Simmons sea uno de mis autores de cabecera. Hyperion no es que me entusiasmara, me gustó algo más El terror, ambientada en las expediciones árticas.

Inicié entonces Ilión con una mezcla de sentimientos. Por un lado, algo viciado por experiencias anteriores. Por otro lado, deseoso de leer lo que tanto apasiona a Fer, de cuyo criterio no tengo dudas. 



Pues bien, al final me he quedado un poco ni-chicha-ni-limoná. Un poco en medio. No ha ayudado el que una obra en un solo volumen se comercialice artificialmente dividida en dos partes: El asedio y La rebelión. Siempre me ha repugnado esta práctica, destinada a clavar al lector unos cuantos euros extras, aunque ejemplos hay muchos: Timun Mas es especialista en ello, Alamut también lo hizo con el último libro de la saga de Geralt de Rivia, ahora esto... Solo Gigamesh renuncia a ello, a pesar de los ladrillos que últimamente escribe el tito Martin. 

La historia de Ilión mezcla elementos clásicos como la Ilíada de Homero, pero en un escenario tan poco clásico como el planeta Marte, con elemetos más revolucionarios e interesantes desde el punto de vista de la ciencia ficción: en un lejano futuro, apenas cien mil personas habitan el planeta Tierra; personas que se faxean, o sea, se envían a sí mismos a otros puntos del planeta, distantes miles de kilómetros (apasionantes disquisiciones metafísicas aparte: ¿es la misma persona la que se reconstruye?). Esas personas son como los eloi de La máquina del tiempo, desde el punto de vista de que hay una raza de constructos (voynix) que cuidan de ellos. Pero su ciclo vital termina invariablemente al cumplir sus últimos Veinte, a los cien años (aquí recuerda un poco a La fuga de Logan). Curioso, las mujeres pueden elegir conscientemente el momento de quedarse embarazadas y quién será el padre...

La línea argumental se mezcla con otra que nos introduce a los moravecs. Estos son una especie de organismos cibernéticos (ciborgs) altamente especializados, que "viven" en las lunas de Saturno y que se ven envueltos en la historia al detectar una fuente de impulsos cuánticos en Marte que ponen en peligro la existencia del Universo. 



Por último, en el planeta rojo, los posthumanos (evolucionados gracias a nanotecnología) se disfrazan de dioses clásicos y se divierten recreando la guerra de Troya. Utilizan humanos resucitados con ayuda de su avanzada tecnología, humanos como Hockenberry, especialistas en la obra de Homero y que dedican cada día de sus nuevas vidas a contrastar que Homero contó la historia tal y como fue.

Esos tres hilos argumentales van convergiendo hasta un punto común. Pero ahí está el problema principal: no me ha parecido haber llegado a un climax de la historia. Las páginas van pasando, pero no emocionan, no llegan. Los recuerdos de la novela, que he leído hace cosa de un mes, son bastante nebulosos. A pesar de que hay multitud de pequeñas ideas y detalles que hacen la lectura muy interesante para el buen aficionado a la ciencia ficción. 

Perdonemos entonces algunos pasajes que son, digámoslo con claridad, aburridos; y quedémonos con lo bueno. Por eso, le doy un siete, aunque con perspectiva negativa, a la espera de ponerme con la segunda parte, Olimpo, de nuevo dividida en dos.

6 comentarios:

  1. Hombreee, un 7 aún con perspectiva negativa sigue siendo un 7. Me alegro que por una vez le reconozcas el mérito al tio Dan.

    No nos vemos en persona, pero sabes que te sigo fielmente por aquí y que sigues en mis oraciones (las pocas veces que voy a misa, todo hay que decirlo).

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  2. Un 7 con perspectiva negativa? Qué significa esto? Como si fuese una escala de pH?
    Entonces ¿lo leo o no lo leo?

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  3. Esto no tiene nada que ver en esta entrada, pero como no tienes chat, pues lo publico aquí mismo.
    A ver ¿cuándo hacemos una valoración para El juego de Ender? Me refiero a la película, porque todos sabemos que el libro es un 9/10.

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    1. Pues a mí no me parece de 9... lo leí hace unos años y casi no me dejó poso. Lo releeré antes de ver la peli.

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