El hogar de miss Peregrine para jóvenes peculiares

El joven Jake ha crecido escuchando las extravagantes historias de su abuelo sobre un extraño orfanato en el que pasó gran parte de su niñez. Para todos los demás, el abuelo no está muy bien de la cabeza, pero para el nieto, hay algo más de lo que parece, sobre todo cuando recibe de él una serie de pistas que espera le lleven a ese lugar. 

Jake acompaña a su padre a la localidad de Cairnholm en el viaje que realiza para recabar información ornitológica que necesita para su último trabajo. En esa localidad Jake buscará el lugar. 

 

Por supuesto que lo encontrará, más por fortuna que por otra cosa. Más bien le encuentran a él. Y a partir de ese encuentro, que a a primera vista pudiera parecer fortuito, Jake accede a un mundo lleno de habitantes extraños y aún más extrañas circunstancias. 

Un orfanato que debería estar destruido y sus ocupantes ya fallecidos, pero que se mantiene en pie como el primer día precisamente porque viven en un día que se repite una y otra vez. Una especie de limbo espaciotemporal, un lugar en el mundo fuera del mundo, como en las historias de las hadas de la antigüedad, el mundo de los elfos en el que un día equivale a años en el mundo real.

Los personajes son jóvenes que tienen habilidades extraordinarias. Una chica levita, otra controla el fuego, un chico es invisible, una niña con fuerza sobrehumana... Todos ellos hacen del Hogar de Miss Peregrine un sitio muy particular. 

 

Foto de familia

 

Pero no todo podía ser idílico, por supuesto. Unas criaturas invisibles al común de los mortales, buscan activamente el lugar. Necesitan devorar los ojos de los niños peuliares para poder evolucionar y pasar a la siguiente etapa de su desarrollo. 

La película narra las aventuras y desventuras de Jake en su afán de proteger a sus recién descubiertos amigos, igual que su abuelo Abe hizo décadas atrás. 

Eva Green es Miss Peregrine y le da ese aura mágica y especial que requiere el personaje. Asa Butterfield se consagra como actor de películas de culto gracias a ésta y a La invención de Hugo, encarnando al bueno y valiente Jake. 

Un día que se repite

 

Estética y visualmente atractiva, la historia fantástica de El hogar de miss Peregrine para jóvenes peculiares, se beneficia de la imaginación grandiosa de Tim Burton, aunque me parece más comedido que en otras adaptaciones. 

La película se deja ver, aunque a veces se hace un poco larga y los niños desconectan, sobre todo si son pequeños. Para los mayores resulta curiosa y entretenida. En imdb cotiza hoy a 6,7, que me parece una nota bastante correcta. 

Es una adaptación de la novela del mismo título escrita por Ransom Riggs (la primera vez que sé de su existencia, gracias a brujulear por la red para esta entrada), entorno en el que ha escrito varias novelas más.

Broadchurch (T2 y T3)

La primera temporada de Broadchurch fue redonda, digna representante de la tradición de grandes series policíacas británicas. Tanto el pueblo como el reparto se fusionan con la trama de una forma brillante, llevando a la miniserie a un final tan sorprendente como aplaudido.

Unos pocos años después se rodó una segunda temporada y luego una tercera. Veinticuatro episodios en total. 

Ya lo he visto varias veces. Una gran idea se estira demasiado y llega a afectar al legado que el programa deja en la memoria de los espectadores. Un ejemplo claro fue Homeland, cuya primera temporada es digna de pertenecer como una de las mejores de la historia. Por eso son tan importantes series como The Americans, que saben dejarlo cuando toca. 

Las temporadas adicionales de Broadchurch tienen un efecto a medio camino. No son suficientes como para destrozar el global, ni tan buenas para no afectar al conjunto. 

A ver, el pueblo sigue estando ahí. Los actores, muy brillantes en su mayoría, siguen ahí. No deja de ser una gozada ver de nuevo a Olivia Colman y a David Tennant en sus personajes de Miller y Hardy. Pero... 

 

Serie coral

No sé... Que el aesino del pequeño Latimer decida no declararse culpable e ir a juicio, que se pongan de manifiesto defectos formales en la instrucción de los dos detectives para añadir carga dramática... todo parece una pirueta para justificar la extensión. 

Añade también detalles sobre el inspector Hardy, su fallido matrimonio y un caso anterior que todavía le persigue por no haber podido llevar a la cárcel al culpable. Personajes y situaciones del pasado se unen a otros del presente, orientando la historia hacia un final común junto con un tercer caso independiente: la violación de una asistente a una fiesta de cumpleaños en el aparentemente paradisíaco pueblo de Broadchurch.

Pues nada, además de acabar de convencerme de que Broadchurch está lejos de ser un destino vacacional agradable, todo lo demás me entretiene sin alardes. Con mucho oficio, eso sí, porque no podía ser otra cosa tratándose de una serie británica, pero bastante lejos de esa primera temporada que resultó tan atractiva en todos los sentidos. 

 

Marco incomparable

 

La serie tiene una nota media de 8,4 en imdb, lo que no es ninguna tontería, pero también es verdad que ningún episodio supera en puntuación a los dos finales de la primera temporada y que la segunda temporada parece ser la más floja de las tres, como si de una transición se tratara. 

No obstante, el conjunto sigue siendo muy recomendable y el número de capítulos lo bastante pequeño como para ser un visionado muy atractivo.

El hombre demolido

Tenía una cierta prevención a leer El hombre demolido, influido por la película de Sylvester Stallone. Por suerte, el parecido se queda en el título y nada más. 

El libro comienza con una guerra económica entre dos magnates, en un futuro incierto pero que se intuye relativamente cercano. Ambos magnates han estado echándose los trastos a la cabeza durante un tiempo y parecen estar cansados de ello. Una reunión en persona parece ser lo mejor para pasar página y olvidar, en la medida de lo posible. Pero esa reunión acabará con uno de ellos muerto y el otro perseguido por la policía como sospechoso de asesinato y posible candidato a la demolición. 

La sociedad de El hombre demolido es una sociedad en la que existen personas con capacidades extrasensoriales. Están divididos en castas, o niveles si se prefiere así, con diferentes aptitudes, deberes y privilegios dependiendo del nivel de su poder. Sin embargo, por norma general no aspira ni se encuentran en puestos dominantes de la sociedad, sino que sirven a sus conciudadanos en la medida que les es posible. Muchos de ellos se enrolan en la policía y luchan contra el crimen.

 

Hay que poner en contexto aquí que debe ser complicado ser autor de un crimen y que te persiga un telépata, como le ocurre al supuesto asesino. La presión de tratar de esconder tus pensamientos más íntimos a un interlocutor que, en el mejor de los casos puede leer tus pensamientos superficiales y en el peor de los casos es capaz de darle la vuelta a tu cerebro como un calcetín. 

Seguro que nos viene a la cabeza Minority report, pero aparte del recurso de los telépatas en ambos casos, no pueden ser más distintas.

El hombre demolido pasa después por diversas etapas, en las que el policía telépata persigue a su presa, siempre un paso por detrás de él y sin ser capaz de alcanzarle para poner a prueba sus defensas en un interrogatorio, mientras el sospechoso busca por todos los medios a su alcance protegerse de su perseguidor. 

Hasta que en el clímax de la novela se produce el encuentro final entre ambos, que solo puede tener un resultado. 

El hombre demolido, publicada originalmente en 1953, es una novela del período clásico de la ciencia ficción, con sus virtudes y defectos. 

 

El autor

 

Entre los segundos podemos contar que los personajes, en muchas ocasiones, no son más que esbozos de lo más superficiales, salvo quizá en el caso de los dos protagonistas. Por supuesto, hija de su tiempo, no vaya el lector en busca de un personaje femenino con peso en la trama, que no lo encontrará. No obstante, tampoco se debe demonizar a la novela ni al autor por ello, puesto que son hijas de su tiempo. 

La mayor virtud de la novela es, por supuesto, la historia que se construye en apenas doscientas cincuenta páginas. Como ya he comentado en varias ocasiones, admiro a los autores que son capaces de construir un planteamiento, un nudo y un desenlace más que satisfactorios en un espacio de papel reducido, en un mundo editorial en el que cada vez más proliferan los tochos que se acercan peligrosamente a las mil páginas. 

Recomendable, como clásico que es de la ciencia ficción. E imprescindible, si queremos saber en qué consiste la desasosegante demolición.

Black Mirror (T2 a T5)

Black Mirror es una de esas series que hay que ver o por lo menos probar algún capítulo. Hay quien dice que hay un antes y un después de la serie en la historia de la televisión.Yo no diría tanto, pero sí es verdad que algunos de sus episodios son una delicia, mientras que otros son un aburrimiento o no llaman tanto la atención.

Se trata de cinco temporadas y un total de apenas veintidós capítulos, aunque con una duración por capítulo que se encuentra bastante por encima de la hora. Capítulos que son autoconclusivos, sin una aparente relación entre ellos, más allá que describir situaciones en las que la tecnología afecta a nuestra vida, en algunas ocasiones bastante más allá de lo que nos podríamos imaginar. 

 

 

Seguramente es ése el mayor problema de Black Mirror: la irregularidad de la calidad de los capítulos. Sobre todo cuando son tan largos y a veces cuesta horrores verlos. 

Se puede entonces optar por ver los mejores y obviar los peores. No me parece una mala opción, pero para alguien que es un completitsta como yo, me cuesta mucho dejar huecos en el visionado. Aunque confieso que en varias ocasiones estuve trasteando con el móvil al tiempo que transcurrían los minutos del capítulo. 

Blanca Navidad (2x04) es el capítulo mejor valorado de todos. Está muy bien, la verdad, y sirve entre otras cosas para dar una buena medida de Jon Hamm fuea del maravilloso Don Draper de Mad Men. Dos hombres se encuentran solos en una cabaña aislada por un fuerte temporal de nieve y pasan el tiempo contando historias. La realidad resulta ser muy diferente a lo que aparenta ser. 

La T3 mantiene un nivel muy alto, por no decir altísimo. 

Nose dive (3x01) nos presenta una sociedad en la que los likes tienen bastante más importancia que hoy en día. La popularidad en redes sociales sirve para tener mejores opciones en la vida real, incluso condiciones preferentes en cuanto a préstamos bancarios. La protagonista es Bryce Dallas Howard y en el capítulo es uno de los pocos con un final relativamente feliz.

 Shut up and dance (3x03) es la historia de un joven al que un grupo de personas chantajea para realizar diversas acciones, a cada cual más ilegal, tras pillarle en una situación comprometida delante de su ordenador portátil. Es una muestra de la genialidad de Black mirror, porque es uno de los episodios más desasosegantes de todos. Lo brillante aqui es que ese desasosiego no viene por las situaciones, sino que viene derivado de apenas una frase del guión que cambia el sentido a todo lo visto con anterioridad. 

La T4 es bastante más irregular, alternando capítulos muy brillantes con otros bastante más anodinos, cuando no directamente prescindibles. 

USS Callister (4x01) es en cierto modo una parodia de Star Trek y los juegos online multijugador, aunque con esa fachada no pasa la oportunidad de mostrarnos un villano de los tiempos modernos que utiliza el juego para martirizar a quienes le han incomodado en la vida real. 

Hang the DJ (4x04) coge el tema de moda de las apps para relaciones y construye un universo en el que el sistema de inteligencia artificial le da una fecha de caducidad a cada relación. La pareja protagonista luchará para demostrar que en el amor la última palabra no está escrita de antemano. 

Black Museum (4x06) puede parecer en principio un capítulo menor. Una joven de color visita un perdido museo del crimen en medio de una polvorienta ruta de carretera. Calor, polvo y sudor se entremezclan con varias historias de asesinos y psicópatas. Otro capítulo con giro final que no se ve venir hasta que es casi demasiado tarde. La protagonista es Letitia Wright, conocida en el Universo Cinematográfico Marvel. 

 

 

La T5, de solo tres episodios, muestra el agotamiento de la fórmula. Ninguno alcanza un 8 de nota media en imdb y solo el segundo logra pasar del 7. Sin embargo comienza con Bandersnatch, una especie de Elige tu propia aventura en video, en el que los espectadores eligen por dónde va la historia. Yo solo he podido ver la edición lineal, un poco confusa, y por tanto no puedo hablar de la experiencia, pero por lo menos resulta ser una propuesta interesante.

Rachel, Jack and Ashley too (5x03) tienen el dudoso honor de ser el episodio peor valorado de toda la serie y no me pareció tan malo. Hasta es divertido por momentos. Y las críticas que recibió Miley Cyrus tampoco las comparto. 

Black Mirror tiene en imdb una nota media de 8,8, de las más altas que he podido ver, pero su irregularidad hace que verla entera sea un ejercicio de voluntad y completismo.