Ayer tuve ocasión de despedirmede dos amigos, Philip y Elizabeth Jennings. O mejor, Misha y Nadehzda. O mejor aún, The americans, una de las mejores series de televisión que he visto nunca y de la que ya he hablado por aquí de sus temporadas T1 a T3.
Pocas series de televisión me han enganchado tanto como esta. Desde sus temporadas iniciales a la T4 (con una trama basada en la guerra bacteriológica y varios capítulos de infarto, como aquel en el que Gabriel y Elizabeth se contagian de una cepa especialmente virulenta que había robado William Crandall con anterioridad) y la T5 (en la que Paige Jennings se convierte en figura central y en motivo de discusión entre sus padres).
Entre la T5 y la última, la T6, han transcurrido tres años y muchas cosas que poco a poco vamos intuyendo. Cuesta acostumbrarse a unos personajes familiares, pero que a la vez han cambiado, sobre todo por dentro, hasta hacerse casi extraños.
Hay que pasar un período de adaptación, pero la acción sigue su curso, en este caso centrada en las negociaciones de no proliferación de armas nucleares que la Administración Reagan y el gobierno de la Unión Soviética de Gorbachov mantuvieron a mediados de la década de los ochenta del siglo pasado. Una acción que, poco a poco, tomará una velocidad vertiginosa hasta convertirse en una atmósfera opresiva para los Jennings.
No quiero hablar mucho, para no destripar la historia y que el que quiera pueda ver ese final con la misma inocencia con la que yo la ví. En realidad no ha sido demasiado difícil pues, aunque la serie ha sido aclamada por la crítica, está muy lejos de haber tenido el hype de otras, como Juego de Tronos, y no he tenido que esquivar noticias ni a desaprensivos haciendo spoilers continuamente. Así que, creedme, se agradece ver la serie de esta forma.
Solo diré que es una serie de personajes, magistrales todos ellos, y de historia, admirablemente trenzada hasta el final. Genial Matthew Rys (Philip Jennings, abnegado hasta el final), Keri Russell (Elizabeth, fría como un témpano y decidida), Noa Emmerich (el agente del FBI Stan Beeman... pero también Costa Ronin (Oleg Búrov, un hombre bueno)... o personajes como Claudia, Gabriel, Paige, Henry.....
Solo diré que hay una escena en el capítulo 6x10 que transcurre en un garaje, que dura más o menos diez minutos y que es de lo mejorcito de una serie que ya de por sí ha sido fantástica. Y que después de esa escena comienza a sonar la maravillosa Brothers in arms, de mis adorados Dire Straits.
El final, un final de casi veinte minutos, ha sido duro. Casi diría que cruel. Pero también es posible que haya sido el mejor final posible para todos los protagonistas. Y después, el vacío estomacal.
The americans, una serie sobresaliente.
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