domingo, 22 de septiembre de 2024

The leftovers

 

Me siento un poco avergonzado por la opinión que tengo de The leftovers. Se supone que es una de las mejores series de televisión, si no de siempre, por lo menos de los últimos tiempos y está muy bien valorada en imdb, pero no he entendido nada.

La premisa y el inicio son espectaculares: de repente, el dos por ciento de la población mundial desaparece sin dejar rastro. Nada. Ni una corriente de aire, ni un plop ni nada por el estilo. Simplemente estaban hace un segundo y al siguiente ya no están. 


Accidentes de tráfico, laborales, escenas familiares, todo se ve afectado y lo vemos con ojos de asombro. La cosa promete, no voy a decir otra cosa .

A partir de entonces somos testigos de las vidas de los que se han quedado. Casi cada persona en la Tierra se ha visto afectada por la pérdida de un ser querido. Algunos, los más desafortunados, pierden a más de uno, lo que afecta a su estabilidad emocional. 

Cada uno intenta pasar el duelo lo mejor posible. Algunos consiguen seguir con sus vidas, otros se refugian en la religión y los hay que incluso se niegan a pasar página o que piensan que los que se han quedado son culpables por algún motivo oculto. 


La serie no es nada amable con el espectador. Se dan pocas explicaciones y nos sumrge en ese univrso, a veces opresivo, que resulta ser la vida cotidiana. Y, de tanto en tanto, aparece ese grupo de personas, vestidas de blanco, siempre fumando y siempre silencionsas, que no tenemos ni idea de qué hacen o por qué.

Poco a poco se va desarrollando esa historia a lo largo de tres temporadas, girando en torno a un puñado de protagonistas. Kevin (Justin Theroux), sheriff del pueblo que aparentemente no ha perdido a nadie, pero que su familia se ha autodestruido; su mujer, Laura (Amy Brenneman, que se ha unido al grupo de blanco y cuya pérdida, que veremos más adelante, es especialmente dolorosa; Christopher (Matt Jameson), pastor que vive con su mujer, en estado vegetativo como resultado de un accidente con un coche cuyo conductor desapareción, Nora (Carrie Coon), que al contrario que Kevin perdió a toda su familia en un instante; Patti (Ann Dow), que es la líder del grupo de personas de blanco.

 


El elenco de actores era bastante desconocido para mí en cuanto a nombres, no así en cuanto a rostros, algunos de los cuales reconocía de otras películas o series, como Janel Moloney (de El ala oeste de la Casa Blanca), Regina King (que salía en The big bang theory o la serie de Watchmen), Scott Glenn (capitán del submarino Dallas en La caza del Octubre Rojo) o Liv Tyler

Son pocos capítulos, pero la historia evoluciona, con algún episodio un tanto extravagante, como cuando vemos que Christopher está escribiendo una especie de evangelio en el que, por algún motivo, Kevin es el mesías. 

 

Los pesados de blanco

Aguanté toda la serie, con sus saltos que a veces parecen aleatorios. Incluso scuché varios podcast en los que se hablaba de ella y se intentaba explicar algo del argumento. Pero me ha sido del todo imposible interiorizar una explicación a todo lo que estaba viendo. Así que, al final, ponía los episodios y los veía en piloto automático, casi sin prestar más atención que la que merece el acto de respirar o parpadear, viendo pasar las imágenes ante mis ojos, pero con un encefalograma casi plano.

Y cuaando la serie está llegando a su fin y, parece, que quiere explicar todo, tampoco lo entendí, así que me siento un poco mal, porque para bastante gente es una maravilla. Y es que tiene hoy un 8,3 en imdb, que hay que tenerlo, con más de 116 mil valoraciones. O sea, que debe ser buena. Pero para mí simplemente es una serie rara, en ocasiones entretenida y las más de las veces, aburrida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario